jueves, 16 de octubre de 2008

Sueldos cieneuristas

Cada vez que oigo hablar de los mileuristas babeo de envidia. Esto me pasa porque soy un becari@ y, por tanto, no tengo derecho a cobrar más de 250 euros al mes. A tantos males (morirse de hambre el principal de ellos), hay que sumarle otro hecho: si me licencio la empresa me echará a la puta calle. Dejan de contar conmigo para poder becar a otra persona ya que a mi lado (un pobre cieneurista) la mano de obra china resulta carisísisima.

martes, 14 de octubre de 2008

Miedo al miedo

Los monstruos de la razón me arrebatan el valor de vivir. El miedo me traslada a un mundo paralelo sin colores ni olores. Es un lugar aséptico y aburrido porque no tienen cabida los cambios ni las sorpresas. Pero sólo así puedo calmar el miedo, encerrándome con él en una habitación blanca y acolchada, sin ventanas desde donde observar la realidad. Por eso, el miedo es lo que más miedo me da.

jueves, 9 de octubre de 2008

Profesor amigo

Aquel que cuando se propone enseñar te cuenta las cosas como un amigo: se lía con la historia, se equivoca con los datos o directamente se los inventa, improvisa...
Es fácil identificar una clase de estos maestros del aburrimiento. En los alumnos provocan efectos tales como apagones cerebrales, somnolencia, pérdida del sentido de la realidad (sobre todo cuando lo que escuchas se parece más a un chiste que a conocimiento puro y duro), etc. Por su parte, el profeamigo durante el transcurso de la lección suele estar empapado en sudores fríos, que le provocan largos ehhhhhhhh, se le pierde la mirada, tartamudea... se han dado casos de infarto al estropearse el proyector (o cualquier otro soporte) que le indica por donde debe seguir leyendo.
No más profeamigos o por lo menos que dejen de leer en voz alta en las aulas. Que investiguen, que iluminen, que focalicen, ¡que enseñen joder!

A los funcionarios que se hacen llamar docentes en la Facultad de Ciencias de la Desinformación (Universidad Complutense de Madrid)